Conocida también como la Perla Azul, Saidia es un pequeño pueblo de Marruecos que se ha convertido en un destino muy turístico por contar con una de las playas más extensas de la región en la que se encuentra, Berkane, muy cerca de la frontera con Argelia.
Arena dorada y muy fina, y bañada por las aguas del Mediterráneo, además de ser este su clima. Al estar a menos de 100 km del aeropuerto internacional y contar con un gran complejo hotelero en primera línea de playa, que es uno de los mayores al norte de África, el flujo de visitantes es continuo.
Pero además de relajarse nadando o bronceando la piel, Saidia también cuenta con un centro histórico, o Medina, con el que deleitarse, en la que destaca la Alcazaba y el zoco. Su estética es la de cualquier pequeña ciudad marroquí, con varias puertas, plazas y calles estrechas que recorrer en busca de la infinidad de tiendas, cafés y restaurantes. Y es que si en sus orígenes era un pueblo muy tranquilo, hoy está completamente adaptado al turismo.
Su paseo marítimo es el que acapara toda la atención, porque junto al puerto deportivo, es donde hay un mayor ambiente. En los restaurantes de esta zona, se puede degustar la gastronomía local, que se combina con la internacional, ambas marcas por la presencia del pescado fresco. Y para completar la experiencia, después de un día de playa se puede continuar celebrando por la noche, puesto que además de los mencionados bares, también dispone de varias discotecas.
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